Panaca firma alianza estratégica con el Sena, Fedecacao y Cartama, y lanza primer Diplomado en Autogestión Alimentaria del país
Herramientas reales para el país

¡Lo estamos logrando! A través de experiencias significativas y exitosas estamos dando a conocer proyectos de impacto como lo es La Remesa, el diplomado en Autogestión Alimentaria y eventos de país: foro Derecho Humano a la Alimentación, potencia para la vida’. Si quieres saber más no te pierdas de este blog, te contaremos.

Con el objetivo de fortalecer, a través de herramientas prácticas, las competencias técnicas, agrícolas, pecuarias y asociativas para la autogestión y siembra de alimentos y el aseguramiento de las necesidades nutricionales de la población, PANACA firmó una alianza estratégica con el Servicio Nacional de Aprendizaje (Sena), la Federación Nacional de Cacaoteros (Fedecacao) y la empresa de exportación de aguacate hass, Cartama. Además, a través de su Fundación Panaca, realizó el lanzamiento del Diplomado en Autogestión Alimentaria para la integración rural, el primero de este tipo en el país.

Mediante los convenios de cooperación y con este nuevo ciclo formativo, se buscará impartir a los estudiantes campesinos conocimientos aplicables de un concepto denominado La Remesa, basado en generar alimentación de la huerta a la mesa, de forma autónoma, con el cual, productos como el pollo, tomate chonto y huevos A, pueden ser adquiridos con porcentajes de ahorro de hasta 34,9%, 60,4% y 20%, respectivamente, comparado con el precio ofrecido en las centrales minoristas del Eje Cafetero y del país

Bajo esta misma idea, teniendo como referencia una dieta saludable del ICBF y la FAO, es posible lograr un ahorro de dinero de hasta 64,28% en el desayuno, 40,5% en el almuerzo y 59,8% para el caso de la cena

También, al hacer el cálculo del gasto requerido en alimentación para una persona sola en un día y una familia de cinco integrantes en un día y en un mes, se evidenció que el ahorro es de hasta 52% utilizando el método de La Remesa, que será enseñado mediante el nuevo Diplomado en Autogestión Alimentaria. (VER GRÁFICA 3). Adicional a este curso, la Fundación Panaca seguirá fortaleciendo su oferta académica en áreas como Producción Agroecológica, Turismo Rural, Lechería Tropical, Porcicultura, Riego y Drenaje, Gestión Administrativa, Fomento para la Asociatividad y un Técnico Laboral Agropecuario.

El programa educativo, se enfocará en enriquecer la economía familiar campesina, en la autosuficiencia alimentaria y en contrarrestar los altos precios de los alimentos, fue puesto al servicio de la comunidad durante el foro ‘El Derecho Humano a la Alimentación, potencia para la vida’, realizado a inicios de febrero, un espacio que buscó propuestas y estrategias con miras a generar un desarrollo territorial sostenible, mejorar la eficiencia en el uso de recursos y fortalecer la vocación productiva del suelo colombiano.

En el evento participaron campesinos, representantes de la rama pública y empresarios del sector agropecuario, quienes compartieron ideas y debatieron alrededor de uno de los objetivos primordiales del Plan Nacional de Desarrollo 2022-2026: la reducción del hambre a través del derecho a la alimentación digna, tema central del diplomado.

Jorge Ballen, presidente corporativo de Grupo Panaca, afirmó que “la incidencia de la pobreza monetaria en el sector rural es superior a 44%; por esto, la autogestión alimentaria, con una adecuada transferencia de saberes, es clave para la reducción de hambre y pobreza en el país, dando paso al fortalecimiento del campo colombiano. Tal como afirmó Ron Finley: “Cultivar tu propia comida, es como imprimir tu propio dinero”. El campesino debe ser el primer actor de la cadena con acceso a la alimentación; no es justo que él sea el último en comprar y adquirir sus alimentos, luego de cuatro, cinco o seis manos de intermediación, cuando es él quien pone su trabajo para labrar, cultivar y abonar la tierra”.

Asimismo, Ballen hizo un llamado a los empresarios, gremios y entidades del sector agropecuario a transformar la vida de sus colaboradores y de sus entornos, con herramientas que apunten a la sostenibilidad rural.

“Por medio de una agricultura colaborativa y la autogestión alimentaria es posible ofrecer productos hasta 25% más económicos si se compara con las centrales de abastos, y hasta 60% más baratos frente al precio ofrecido en plaza por plataformas minoristas. Sin campo no hay ciudad, sin campesinos no hay campo, y sin educación pertinente y habilitante para ellos, no hay prosperidad. Por eso es necesaria la resignificación de la labor del campesino”, complementó Ballen.

Desde el Gobierno, María Olga Peña, directora (e) de Desarrollo Rural del Departamento Nacional de Planeación (DNP), afirmó que uno de los pilares de la política pública será el derecho humano a la alimentación, donde se buscará una mayor oferta y una mejora de la capacidad adquisitiva de alimentos, en particular para los grupos poblacionales con más problemas de acceso.

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